Sublimación del desengaño
Hace unos meses hice algunos cambios en mi vida. Unos voluntarios,
otros no. De entre los segundos nacen las causas del desengaño que me llevó a
abandonar temporalmente las redes sociales. En cuanto a la sublimación, más me
refiero a ella en un sentido figurado que físico.
Adiós blog, adiós
Varios factores han confluido en que me esté planteando no
publicar, al menos no hacerlo en forma de libro por ahora, la continuación de
mi primera novela publicada, Al borde del Caos,
llamada Creadores de Caos. De ahí el que empiece esta primera entrada
del blog hablando de desengaño.
Uno de esos factores, quizás el primero aunque no
necesariamente la causa de todos ellos, fue la desaparición de mis blog de bricolaje
y literatura. Como dominios aún siguen activos, por lo que no voy a
enlazarlos ni referirme a ellos. Supongo que cuando terminen la concesión de
los nombres y tengan que pagar los cancelaran… o quizá los relancen en un
futuro, pero sin mi. Eso explicaría, al menos en parte, que tras decirme que sí
iban a transferirme los dominios de los blogs y permitirme migrar a otro
servidor finalmente dieran la cayada por respuesta. Menos mal que no me fie y
adopté mis propias medidas de protección, básicamente retirar toda la obra
literaria original (deje los artículos, en su mayoría, en especial los que hacían
propaganda del libro) y todas las imágenes de mis montajes de bricolaje y
decoración.
La entrada en «coma» de los blogs, en el sentido de que están
accesibles pero no tienen actualizaciones, hizo que bajaran bastante en el
posicionamiento SEO (el orden que aplica Google y otros buscadores para que
aparezcan primeros) y su efecto se notó en las ventas.
Pausa en las redes sociales
Otro de los factores que influyeron en ellas fue mi desconexión
temporal (que aún mantengo) de las redes sociales. Con solo dos interludios en
los que publiqué algunas entrada, principalmente en Twiter, asociando los
hechos del 1 al 29 de octubre de 2017 con los relatados en Al borde del Caos, y también en los días
cercanos (anteriores y posteriores) a la moción de censura de Pedro Sánchez
contra Mariano Rajoy el 1 de junio de 2018.
Por todo ello (el cese de ingresos adicionales que me permitían
financiar los costes de los trabajos auxiliares a la literatura, la menor
proyección y por lo tanto opción de venta y el propio trasfondo de la historia,
la respuesta de los lectores cero…) he decidido que en lugar de libro, al menos
inicialmente, la publicaré por aquí.
Después… depende de vuestras reacciones.
No hay comentarios:
Publicar un comentario